qué tipo de vino para carnes blancas

Bodega Doña Paula

Pluralidad: Sauvignon Blanc / Año: 2014/ País de origen: Argentina / Región: Valle de Uco, Mendoza / Tipo: Blanco / $35.374 / Buenvivir

para carnes blancas

Cada vez son mucho más los que se decantan por platos de carne blanca, puesto que son comúnmente mucho más saludables que los de carne roja y mucho más suaves. Casar esta clase de carne con vino blanco contribuye a impulsar los sabores del plato y hacer una mezcla idónea para los comensales. No obstante, no todos y cada uno de los platos son iguales y, de ahí que, seleccionar los más destacados vinos para carnes blancas es dependiente del género de elementos que usaremos.

Las carnes blancas, como el pollo, pavo o pularda, acostumbran a tener un gusto despacio y rápido, con lo que es preferible acompañarla con un vino de especificaciones afines para impulsar sus características. Una alternativa increíble para este género de carnes es la de uva tipo Chardonnay, pluralidad que viene de la zona francesa de Borgoña y cuya popularidad es cada vez mayor entre los seguidores al vino.

Garnacha Blanca

Con aroma a flores frescas y con notas de frutas blancas y fondo maduro, es un vino fresco que acompaña con perfección a pescados y comidas asiáticas, tal como a platos de pasta , verdura o arroces.

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Pinot

Otro género de vino blanco que tenemos la posibilidad de estimar para acompañar nuestro plato de carne blanca es el Pinot Grigio o Pinot Gris. Este vino con aroma afrutado resulta perfecto para casar con platos de pasta, pero asimismo con carnes blancas como el conejo, cordero o cerdo, aparte de pescados como el salmón o el atún.

Con aroma de flores frescas y con notas de frutas blancas y fondo maduro, es un vino fresco que acompaña perfectamente a pescados y comidas asiáticas, tal como a platos de pasta, verdura o arroces.

Pinot

Otro género de vino blanco que tenemos la posibilidad de estimar para acompañar nuestro plato de carne blanca es el Pinot Grigio o Pinot Gris. Este vino con aroma afrutado resulta perfecto para casar con platos de pasta, pero asimismo con carnes blancas como el conejo, cordero o cerdo, aparte de pescados como el salmón o el atún.

Con aroma de flores frescas y con notas de frutas blancas y fondo maduro, es un vino fresco que acompaña perfectamente a pescados y comidas asiáticas, tal como a platos de pasta, verdura o arroces.